Programa Actualización Científica sin Exclusiones (ACisE)
 
Informe
Autor del informe original
Alberto Bustillos
Columnista Experto de SIIC
Institución: Universidad Técnica de Ambato
Ambato Ecuador

Genética del hipotiroidismo congénito
El estudio de la genética molecular pone de manifiesto que, en el futuro, aportará datos importantes en cuanto a la identificación de nuevas mutaciones y asociaciones con fenotipos clínicos que podrían relacionarse con el hipotiroidismo congénito, para, de esta manera, potenciar el diagnóstico y tratamiento.

Resumen
Se realizó una revisión narrativa sobre la genética del hipotiroidismo congénito (HC). Se utilizaron las bases de datos Medline/PubMed, LILACS-BIREME y SciELO. Se identificaron los estudios originales publicados entre 2000 y agosto de 2020. Las palabras clave utilizadas durante la búsqueda fueron las siguientes: "hipotiroidismo congénito (congenital hypothyroidism)", "genética (genetic)", "polimorfismos de nucleótido único (SNP) (single polymorphisms nucleotid)". Se revisaron 58 estudios originales que informan las bases moleculares del HC. Se ha definido el concepto básico del HC, así como las bases moleculares que están asociados con la aparición de dicho trastorno. La revisión de la literatura ha permitido identificar al menos 12 genes que codifican las proteínas, las cuales, al producirse mutaciones, están implicadas en el HC. De los 12 genes informados que desempeñan un papel importante en el HC, errores en 6 genes se han vinculado con el HC con disgenesia tiroidea, lo cual implica alteraciones en la morfogénesis de la glándula tiroides, mientras que mutaciones en otros 6 genes se han asociado con dishormonogénesis, que genera un bloqueo total o parcial de los procesos bioquímicos implicados en la síntesis y secreción de hormonas tiroideas. La prevalencia en Sudamérica varía aproximadamente desde 1 por cada 1170 hasta 1 por cada 8285 neonatos. El estudio de la genética molecular pone de manifiesto que, en el futuro, aportará datos importantes en cuanto a la identificación de nuevas mutaciones y asociaciones con fenotipos clínicos que podrían relacionarse con el HC, para, de esta manera, potenciar el diagnóstico y tratamiento.

Publicación en siicsalud
Artículos originales > Expertos de Iberoamérica >
https://www.siicsalud.com/des/expertocompleto.php/165203

Comentario
Autor del informe
Paola Claudia Prener(1) Claudia M. Melillo(2)  

(1) Bioquímica de planta permanente, Hospital Interzonal Especializado de Agudos y Crónicos San Juan de Dios, La Plata, Argentina
(2) Bioquímica de planta permanente, Instituto Médico Mater Dei, La Plata, Argentina


El hipotiroidismo congénito (HC) definido como deficiencia de hormonas tiroideas al nacimiento, es una causa frecuente y prevenible de alteración neurológica y retardo mental. La incidencia varía según la localización geográfica en 1 cada 2000-4000 recién nacidos.
En este trabajo de revisión los autores, a través de una búsqueda exhaustiva bibliográfica en portales latinoamericanos y extranjeros, actualizan las bases genéticas de las dos principales etiologías del hipotiroidismo congénito primario en las últimos 20 años (2000-2020), la disgenesia (atireosis, hipoplasia, ectopia) y dishormonogénesis tiroidea. El desarrollo embrionario y migración de la glándula tiroides es un proceso con etapas diversas que requiere la participación de múltiples factores de transcripción. Se describe el rol fisiológico e implicancia de las mutaciones de los 6 genes NKX2-1,
PAX-8, NKX2-5,FOXE1, DUOX2, GLIS3 y TSHR, los tres primeros de transmisión autosómica dominante. Estos factores además de intervenir en el desarrollo, proliferación y diferenciación celular tiroidea regulan la expresión de genes específicos comotiroglobulina (Tg), tiroperoxidasa (TPO), simportador de sodio y yoduro (SCL5A5). Las mutaciones cromosómicas reportadas (puntuales, deleciones, inserciones) afectan la tiroides y otras glándulas u órganos (riñón, hígado, corazón, pulmón) excepto para el gen del receptor de Tirotrofina (TSHR). Mutaciones homocigotas o heterocigotas en el gen TSHR dan lugar a resistencia a TSH total o parcialmente compensada (hipotiroidismo limítrofe)con tiroides normal o hipoplásica, o hipotiroidismo severo con tiroides hipoplásicao atireosis (resistencia grave a la TSH no compensada) y debería considerarse la secuenciación del gen del receptor en pacientes con los fenotipos descritos y consanguinidad parental.
Los errores congénitos de la biosíntesis de hormonas tiroideas representan el 10-20% de los HC primario. Los defectos en los pasos de la síntesis conducen a dishormonogénesiscon hipotiroidismode gravedad variable y desarrollo de bocio. Las mutaciones genéticas involucradas, de herencia autosómica recesiva, correspondena las enzimas requeridas para la organificación del ioduro TPO, DUOX2 y SCL26A4 (pendrina),síntesis de tiroglobulina (TG),simportador de sodio y yoduro (SCL5A5) ydesyodación de monoyodotirosinay diyodotirosina(IYD). Las mutaciones inactivantesen TPO (mutaciones, errores de empalme, deleciones e inserciones) son las principales responsables de la dishormonogénesis tiroidea y constituye uno de los defectos hereditarios más frecuentes en el HC. Casi un 15% de los casos de HC por defectos enzimáticos responden al gen DUOX2, oxidasas ubicadas en membrana apical de los tirocitos responsables de generar el peróxido de hidrógeno de la ruta biosintética. La nueva era de la secuenciación de próxima generación ha permitido identificar variantes potencialmente patogénicas para los genes relacionados al HC. Los porcentajes reportados por diferentes investigaciones difieren significativamente para disgenesia y dishormonogénesis. El cribado neonatal universal es la herramienta más importante para diagnosticar el hipotiroidismo congénito y se practica de forma rutinaria en la mayor parte del mundo desarrollado. El diagnóstico oportuno y la instauración de un tratamiento temprano y adecuado son fundamentales para prevenir los efectos adversos y optimizar los resultados a largo plazo.
Este artículo es una revisión narrativa de la genética molecular del hipotiroidismo primario congénito que aporta información sobre las relaciones entre el genotipo, fenotipo clínico y nuevas herramientas diagnósticas.

Palabras Clave
epidemiología, genes, genética, hipotiroidismo congénito, terapéutica
Especialidades
EM.gif   GH.gif        Bq.gif   Ep.gif   
Informe
Autor del informe original
Romina Grinspon
Columnista Experto de SIIC
Institución:
Buenos Aires Argentina

El tratamiento de la leucemia no afecta la función endocrina del testículo en niños
Si fue administrado antes de la edad de 10 años, el tratamiento de la leucemia con los protocolos estandarizados en las dos últimas décadas no afecta la producción de hormonas testiculares en niños Si lo fue posteriormente, podría provocar una alteración leve, que no requiere intervención médica durante la adolescencia.

Publicación en siicsalud
Artículos originales > Expertos de Iberoamérica >
https://www.siicsalud.com/des/crosiiccompleto.php/163046

Comentario
Autor del informe
Paola C Prener(1) Claudia M Melillo(2)  

(1) Hospital Interzonal Especializado de Agudos y Crónicos San Juan de Dios, La Plata, Argentina
(2) Instituto Médico Mater Dei, La Plata, Argentina


El abordaje multidisciplinario del cáncer infantil ha mejorado el pronóstico y la calidad de vida de los pacientes, con impacto en la salud pública y psicosocial. Los niños y adolescentes que llegan a la edad adulta son susceptibles a la aparición de secuelas asociadas a los protocolos terapéuticos y factores individuales. Dentro de las endocrinopatías más frecuentes se encuentran los trastornos gonadales que se manifiestan por patologías puberales, insuficiencia gonadal y alteraciones de la fertilidad. Los tratamientos contra el cáncer pueden afectar a los testículos en todas las etapas de la vida.
Los autores del presente artículo original aportan resultados sobre la línea somática testicular, a través de un análisis transversal y longitudinal con seguimiento prolongado en el tiempo en niños prepuberales
y puberales con cáncer hematológico tratados con los esquemas terapéuticos estandarizados recomendados por el ALL IC-BFM 2002. La población evaluada incluyó pacientes pediátricos provenientes de dos Hospitales Públicos de la ciudad de Buenos Aires entre 2002 y 2015. Se clasificaron en dos subgrupos: niños menores a 10 años, y mayores a dicha edad al finalizar el tratamiento. Este punto de corte se asocia a la probabilidad del inicio del desarrollo puberal y a la actividad del eje hipotálamo-hipofiso-gonadal. Según Chemes HE (2001) la infancia se ha considerado clásicamente como una fase inactiva del desarrollo testicular, cuando en realidad, se caracteriza por una actividad intensa e inaparente.
En Los testículos prepúberes existe proliferación de células de Sertoli inmaduras, aumento en el número de células de Leydig y en el volumen testicular. El epitelio germinal del varón es más sensible a los efectos de la quimioterapia y la radioterapia que las células de Sertoli y Leydig. Un aspecto destacable del presente estudio radica en contar con datos sobre el impacto de los tratamientos oncológicos en patologías hematológicas malignas en niños y adolescentes. Los datos de la literatura provienen de extrapolaciones de adultos que han padecido cáncer durante la infancia.
Los biomarcadores utilizados para estimar daño y funcionalidad testicular se basan clásicamente en la cuantificación de las hormonas del eje hipotálamo- hipofiso-testicular y análisis del semen de ser factible. Grinspon RP y colaboradores, en el presente trabajo, analizaron datos demográficos, clínicos y de laboratorio aportados por las historias clínicas de los pacientes. El tamaño muestral incluyó 97 varones con rango etario comprendido entre 1,1 y 16,6 años al momento del diagnóstico e inicio del tratamiento. Dentro de los datos evaluados se incluyeron estadios de Tanner (desarrollo genital y vello púbico) y volumen testicular con orquidómetro de Prader; y datos de laboratorio endocrinológico: hormona anti-Mülleriana (AMH), gonadotrofinas (LH y FSH) y testosterona total (T). Los biomarcadores de la disfunción testicular directos e indirectos de la célula de Sertoli fueron AMH y FSH, y de células de Leydig testosterona y LH respectivamente. El descenso de AMH y T y el aumento de gonadotrofinas fueron expresados como valores absolutos o desvío estándar basado en rango de edad y estadio de Tanner según datos publicados por Grinspon RP y colaboradores (2011).
Los autores detectaron disfunción compensada de las células de Sertoli y Leydig con elevación leve a moderada de gonadotropinas durante la pubertad sin cambios relevantes en AMH y T. Los niveles normales de testosterona y LH durante el desarrollo puberal en la gran mayoría de los casos, revelan una resistencia de las células de Leydig a la terapia. En pre-púberes, los niveles de AMH se mantuvieron dentro de los rangos esperados indicando ausencia de gonadotoxicidad sin cambios en las gonadotrofinas. El seguimiento a largo plazo permitió identificar un subconjunto de pacientes con elevación transitoria de gonadotrofinas y normalización de sus niveles al finalizar el desarrollo puberal. Datos compatibles con disminución del volumen testicular fueron observados en las últimas etapas puberales. La medida de inhibina B y el estudio del semen permitirían determinar si la etiología de estos cambios responde a daño en la célula de Sertoli o en la línea germinal. Las limitaciones declaradas por los investigadores fueron la ausencia de datos para inhibina B, estudio del semen y carencia de seguimiento de algunos pacientes por cierre del estudio (previo a la entrada de la pubertad).
Los autores concluyen que los regímenes terapéuticos utilizados para el tratamiento de leucemia linfoblástica aguda, leucemia mieloide y linfoma no-Hodgkin en niños y adolescentes participantes en este estudio, no causa hipogonadismo primario manifiesto. La disfunción testicular moderada quedaría compensada con un leve ascenso de las gonadotrofinas hipofisarias sin requerimiento, en general, de terapia de reemplazo androgénica. La mayoría de los niños tratados por cáncer cursan normalmente su pubertad con desarrollo de características sexuales secundarias y niveles normales de testosterona. Organismos internacionales sugieren el seguimiento del crecimiento y desarrollo puberal en esta población. Recomiendan la derivación a un endocrinólogo pediátrico a aquellos pacientes que no tengan signos de pubertad a los 14 años, o que muestren fracaso de la progresión de la misma.
Copyright © SIIC, 2021

Especialidades
EM.gif   P.gif        DL.gif   MR.gif   On.gif   U.gif   
ua81618